Aminatu Haidar y la huelga de hambre

Tengo que decir que comparto las reivindicaciones de Aminatu Haidar, la activista saharaui que se encuentra en huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote. Sin embargo, el método elegido me parece básicamente tan estúpido como quemarse a lo bonzo delante de una embajada. No puedo evitarlo, pero el concepto de huelga de hambre lo único que me trae a la cabeza es el enfado de un niño malcriado y caprichoso que les grita a sus padres que va a dejar de respirar hasta que le compren chuches. Y salvando las distancias y la seriedad de la situación, esa parece la actitud, por mucho que comparta totalmente sus razones para hacerlo.

Y mientras ella se suicida lentamente, supuestamente en un heroico sacrificio por sus ideales, yo no puedo dejar de pensar en unos hijos que ven a su madre matarse de una forma muy estúpida y me pregunto si yo podría perdonar a la mía si me hiciera eso siendo un crio. ¿Cómo vas a salvar al mundo si ni siquiera eres capaz de ser una madre viva para tus hijos?

No hay nada de épico en dejarse morir si no se cumplen tus peticiones, algo que saben muy bien todos los secuestradores, que buscan resultados, pero lo hacen de una manera más pragmática. La otra manera, inevitablemente me recuerda el fanatismo de los terroristas suicidas, también muy dispuestos a morir por su causa.

Por otro lado, no puedo evitar pensar que se trata de un ejercicio bastante narcisista, de una manera retorcida claro, pero es que yo soy muy retorcido. Me parece que el ansia por convertirse en mártir responde a un ejercicio de vanidad, porque los ideales no se defienden suicidándote. Y si lo que busca matándose es un gesto que llame la atención de la sociedad, me parece que está fuera de tiempo, hoy en día la gente es muy cínica y pasiva y dentro de dos semanas nadie recordará absolutamente nada de todo esto y ella seguirá muerta

Aunque lo que realmente me revuelve el estómago de toda esta historia (Al margen, claro está, de los políticos) son sin duda todos esos payasos cargados de conciencia social y fuertemente comprometidos que se han ido a hacer una foto junto a ella. Y mientras ella se mata a si misma, ellos se sienten moralmente superiores comiéndose un pincho y una caña mientras hacen declaraciones a la prensa, se ve que tenían tiempo libre entre rodaje y rodaje. Aunque lo que no se si les hará tanta gracia es el hecho de coincidir con la Falange Auténtica a la hora de buscarse causas con las que solidarizarse.

1 comentarios:

Ash dijo...

Coincido totalmente. Está pidiendo un imposible y va a morir irremediablemente sin conseguir nada. Y lo de los famosetes/oportunistas comprometidos a mi me da un poco de vergüenza ajena...